Políticas agropecuarias en América Latina y el Caribe 2023
Fecha
Aug 2024
La agricultura es un sector económico clave en América Latina y el Caribe (ALC), representando casi el 7% del PIB de la región, aunque muy heterogéneo. Por ejemplo, su contribución al PIB es menor al 4% en países como México y Chile, mientras que supera el 15% en Belice y Nicaragua, y alcanza el 20% en Paraguay. Durante 2017-2022, tanto las exportaciones como el crecimiento fueron a un ritmo más lento en comparación con períodos anteriores.
Este informe, el tercero de su serie, analiza sistemáticamente las políticas de apoyo a la agricultura en 25 países de ALC, utilizando la metodología de Estimados de Apoyo al Productor (PSE, por sus siglas en inglés) de la OCDE, sistematizadas por la iniciativa Agrimonitor del BID. En general, los apoyos representan un bajo porcentaje del PIB de la región (1,3%) y de su PIB agropecuario (16%), en comparación con los niveles de apoyo en la Unión Europea, Canadá y Estados Unidos. La principal fuente de apoyo proviene de distorsiones de precios de mercado, que explican, en promedio, el 75% del Estimado de Apoyo al Productor. El Gasto Público Agropecuario (GPA) representa el 5% del PIB agropecuario de la región. También se observa una disminución de la inversión presupuestaria en agricultura en 17 países de ALC en el promedio de los últimos tres años disponibles, comparado con los tres años anteriores. La literatura ha mostrado la importancia de la inversión en bienes públicos agropecuarios y la necesidad de que los países de la región inviertan más recursos en este tipo de apoyos para aumentar la productividad y la competitividad.
Se muestran también los esfuerzos de distintos países de la región en fomentar la sostenibilidad ambiental del sector mediante políticas de adopción de prácticas y tecnologías sostenibles. Los datos muestran que, hasta el momento, no hay una relación clara entre las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de los productos agropecuarios y la cantidad de apoyos de política que estos reciben.
Finalmente, se analizan los apoyos a la pesca y la acuicultura mediante el Estimado de Apoyo a la Pesca (FSE, por sus siglas en inglés), con niveles de apoyo muy distintos entre los países relevados, tanto en términos de magnitud como de composición. Casos como Argentina, Bahamas, Colombia y Perú proveen la mayoría del apoyo en bienes públicos, mientras que Costa Rica, Brasil y Surinam otorgan el apoyo de forma directa a sus pescadores.
Este informe, el tercero de su serie, analiza sistemáticamente las políticas de apoyo a la agricultura en 25 países de ALC, utilizando la metodología de Estimados de Apoyo al Productor (PSE, por sus siglas en inglés) de la OCDE, sistematizadas por la iniciativa Agrimonitor del BID. En general, los apoyos representan un bajo porcentaje del PIB de la región (1,3%) y de su PIB agropecuario (16%), en comparación con los niveles de apoyo en la Unión Europea, Canadá y Estados Unidos. La principal fuente de apoyo proviene de distorsiones de precios de mercado, que explican, en promedio, el 75% del Estimado de Apoyo al Productor. El Gasto Público Agropecuario (GPA) representa el 5% del PIB agropecuario de la región. También se observa una disminución de la inversión presupuestaria en agricultura en 17 países de ALC en el promedio de los últimos tres años disponibles, comparado con los tres años anteriores. La literatura ha mostrado la importancia de la inversión en bienes públicos agropecuarios y la necesidad de que los países de la región inviertan más recursos en este tipo de apoyos para aumentar la productividad y la competitividad.
Se muestran también los esfuerzos de distintos países de la región en fomentar la sostenibilidad ambiental del sector mediante políticas de adopción de prácticas y tecnologías sostenibles. Los datos muestran que, hasta el momento, no hay una relación clara entre las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de los productos agropecuarios y la cantidad de apoyos de política que estos reciben.
Finalmente, se analizan los apoyos a la pesca y la acuicultura mediante el Estimado de Apoyo a la Pesca (FSE, por sus siglas en inglés), con niveles de apoyo muy distintos entre los países relevados, tanto en términos de magnitud como de composición. Casos como Argentina, Bahamas, Colombia y Perú proveen la mayoría del apoyo en bienes públicos, mientras que Costa Rica, Brasil y Surinam otorgan el apoyo de forma directa a sus pescadores.
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