Semillas para la seguridad alimentaria en América Latina y el Caribe (ALC)

América Latina y el Caribe (ALC) fue la única región que logró el Objetivo de Desarrollo del Milenio (ODM) de reducir a la mitad la proporción de personas con desnutrición entre 1990-2015. Sin embargo, desde entonces, la región ha experimentado un aumento en el número de personas que enfrentan hambre. De hecho, ALC pasó de tener 38 millones de personas en condición de hambre en 2014 a 42,5 millones en 2018. La pandemia del COVID-19 y otras crisis recientes han agravado este problema al aumentar la pobreza y la desigualdad, además de generar presiones inflacionarias que han encarecido el precio de los alimentos. Actualmente, se estima que más del 40% de la población en la región sufre de inseguridad alimentaria y 8,6% están en condición de hambre (FAO, 2022). Para enfrentar este problema, es crucial que los gobiernos de la región implementen políticas de desarrollo agrícola y social que promuevan sistemas alimentarios resilientes, sostenibles e inclusivos mediante la implementación de políticas que aborden la inseguridad alimentaria en sus cuatro dimensiones: disponibilidad, acceso, utilización y estabilidad de los alimentos.