Herramientas de diagnóstico y gestión para la salud urbana en America Latina y el Caribe: guía de uso
Fecha
Oct 2023
La Salud Urbana se refiere la salud y el bienestar físico, mental y social de las personas que viven en las ciudades y en áreas urbanas, la cual está influenciada por múltiples características del entorno social y del entorno físico construido y por las políticas públicas de múltiples sectores incluyendo desarrollo urbano, transporte, vivienda, entre otros. Las intervenciones de desarrollo urbano y políticas públicas implementadas en el ambiente construido como viviendas, parques, espacios públicos, transporte, entre otros, contribuyen a promover la salud urbana y la equidad en salud al incidir sobre el entorno físico y el entorno social donde habitan las personas.
El enfoque SeTP (Salud en Todas las Políticas) de la Organización Mundial de la Salud promueve la formulación de políticas de cualquier sector que sistemáticamente consideren las implicaciones en la salud y promuevan la búsqueda de sinergias intersectoriales que impulsen la equidad y la promoción de la salud.
Hay tres acciones claves para incorporar la salud en las intervenciones urbanas:
1. Entender los potenciales co-beneficios en salud de cada intervención urbana.
2. Incorporar la lente de la salud desde el inicio del diseño de la intervención urbana y hacerle seguimiento durante todas las etapas del proyecto.
3. Trabajar de manera coordinada e intersectorial con distintas áreas de desarrollo urbano, entidades gubernamentales, la comunidad y la academia para gestionar la salud urbana.
Para promover estas acciones en las ciudades de América Latina y el Caribe, el Banco Interamericano de Desarrollo pone a disposición de los ministerios de urbanismo y los gobiernos locales herramientas de diagnóstico y un instrumento gestión para la salud urbana. Las Herramientas de diagnóstico para una salud urbana equitativa en América Latina y el Caribe permiten la recolección y análisis de indicadores del entorno físico, del entorno social y de salud que tienen el potencial de ser influenciados por distintos tipos de intervenciones de desarrollo urbano y vivienda. Por su parte, el Instrumento de gestión para una salud urbana equitativa plantea una metodología y ruta para diseñar intervenciones y hacer seguimiento al proceso mediante el cual las intervenciones urbanas, en integración con la gestión multisectorial y comunitaria, pueden promover productos y resultados para la salud, el bienestar y la equidad.
El enfoque SeTP (Salud en Todas las Políticas) de la Organización Mundial de la Salud promueve la formulación de políticas de cualquier sector que sistemáticamente consideren las implicaciones en la salud y promuevan la búsqueda de sinergias intersectoriales que impulsen la equidad y la promoción de la salud.
Hay tres acciones claves para incorporar la salud en las intervenciones urbanas:
1. Entender los potenciales co-beneficios en salud de cada intervención urbana.
2. Incorporar la lente de la salud desde el inicio del diseño de la intervención urbana y hacerle seguimiento durante todas las etapas del proyecto.
3. Trabajar de manera coordinada e intersectorial con distintas áreas de desarrollo urbano, entidades gubernamentales, la comunidad y la academia para gestionar la salud urbana.
Para promover estas acciones en las ciudades de América Latina y el Caribe, el Banco Interamericano de Desarrollo pone a disposición de los ministerios de urbanismo y los gobiernos locales herramientas de diagnóstico y un instrumento gestión para la salud urbana. Las Herramientas de diagnóstico para una salud urbana equitativa en América Latina y el Caribe permiten la recolección y análisis de indicadores del entorno físico, del entorno social y de salud que tienen el potencial de ser influenciados por distintos tipos de intervenciones de desarrollo urbano y vivienda. Por su parte, el Instrumento de gestión para una salud urbana equitativa plantea una metodología y ruta para diseñar intervenciones y hacer seguimiento al proceso mediante el cual las intervenciones urbanas, en integración con la gestión multisectorial y comunitaria, pueden promover productos y resultados para la salud, el bienestar y la equidad.
