Brecha de género en los ingresos laborales en Chile: un análisis de su evolución en el periodo 1990-2020

La brecha de ingresos laborales entre hombres y mujeres en América Latina es un obstáculo para lograr la igualdad de género y el desarrollo sostenible. En Chile, esta brecha persiste a pesar de que las mujeres en muchos casos tienen un mejor perfil laboral que los hombres, lo que sugiere la existencia de sesgos de género. También se aprecia que esta es mayor entre las personas con educación terciaria, que habitan en el área urbana y que no son cuenta propistas. Se percibe, sin embargo, una diferencia de ingresos heterogénea a favor de los hombres en la mayoría de las ocupaciones. Para analizar la brecha de género en los ingresos laborales en Chile entre 1990 y 2020, en este estudio se utilizan las Encuestas de Caracterización Socioeconómica Nacional (CASEN) armonizadas por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y se presentan dos metodologías para estimarla: la descomposición Blinder-Oaxaca y la de Ñopo. Se evidencia una brecha de ingresos total entre mujeres y hombres en el período analizado, y además se mostró la existencia de posibles sesgos de género. Esto indica que se requieren esfuerzos adicionales para comprender la disparidad registrada. El análisis muestra que, si bien la brecha total se ha reducido, al igual que ha sucedido en muchos otros países de la región, por lo general esta disminución se relaciona con la brecha explicada (derivada de las dotaciones de los individuos en educación, experiencia laboral, edad) y no con una reducción de la brecha que no puede ser explicada por estas variables. Esta última podría estar asociada a normativas diferenciadas por género, prejuicios, sesgos o discriminación, por lo cual determinar sus componentes con metodologías específicas, resulta un requisito para poder implementar políticas que le hagan frente, dado que persiste en el tiempo.